Después de haberme enterado en Facebook que el amigovio de entonces (al que no había visto en un mes) tenía una nueva relación sentí que otra vez había cometido los errores de siempre, no haber dicho lo que sentía por la tonta idea de protegerme y no dejarme en evidencia. Recuerdo que estaba muy enojada porque me sentí utilizada (es muy cómodo sentirse ofendida) cuando en el fondo sabía que siempre lo tuve de sex-pal que no íbamos a ser más que eso. Después del correspondiente llanto y días de rabia hacia el susodicho entendí que no fue su culpa, no fue culpa de ninguno, si no funcionó es porque no éramos el uno para el otro y es lo mejor que pudo haber pasado, ahora lo sé.
Pasé las fiestas de fin de año de forma muy distinta a como había hecho antes, como soy monse siempre la pasaba en familia, pero esta vez me fui a la playa con mi amiga del alma, Zare, siento que fue el cambio que necesitaba, por más insulso que sea fue como un punto de partida, este año debía hacer cosas distintas y arriesgarme.
Dejé de trabajar en la universidad cuando mi mamá me rogó que la ayude con su empresa, una empresa pequeña muy difícil de llevar, hoy ya no trabajo con ella porque no es una buena idea trabajar con la familia sobre todo cuando no puedes cambiar la relación madre-hija por jefa-empleada. Fue complicado, estando más cerca de ella quería estar más lejos. Definitivamente, junto a ella me siente muy incómoda, a mayor distancia geográfica nos llevaremos mejor.
Ahora, desempleada y sin nada en el bolsillo tengo todo el tiempo del mundo para terminar mi tesis del "Efecto Fin de Semana en los Mercados Bursátiles Latinoamericanos" que está congelada desde agosto del año pasado. Hay una motivación extra para ello.
Sacrilegio: Recién descubrí a Zoé, grupo que antes había oído mencionar pero como vivo en la Luna no me di ni por interesada, tonta de mí, ahora escucho el último disco recopilatorio, es una pasada, todo conjuga muy bien, el sonido y la voz del vocalista, qué joyita que tienen los mexicanos.
