4 de julio de 2007

Desde el fondo de mi corazón... te he escrito una carta

“Porque el mundo que va como a la velocidad del rayo
aguanto más el vuelo si me agarro de tu mano
acompáñame hasta donde pueda llegar
en este mundo que va como la luz del pensamiento
el mérito está en no quedarme en el intento”

Querido Juan

Es medianoche estoy sola pero ya no como antes, porque siento que me acompañas desde donde estés, quiero confesarte que desde que te conocí mi mundo ya no es el mismo, está dado vueltas y ya no lo reconozco, al principio me sentí perdida, incómoda y temerosa de este nuevo lugar, no sabía que ya formabas parte de mi nuevo mundo desde ese primer beso, quise huir y llegué a lastimarte innecesariamente, tenía miedo, miedo al sentimiento que ahora estoy llegando a experimentar, en este punto sólo sé que te extraño mucho, tanto que mi cuerpo se estremece de sólo oír tu voz y arde de deseos de sentirte otra vez, que mis ojos tienen un brillo que antes no conocían, mi corazón late más fuerte y hasta me preocupo por ti.

Has vencido, lo reconozco, llegaste a quebrar las murallas que tanto tiempo atrás había levantado, cómo fuiste capaz no lo sé, y te respeto más por el esfuerzo que hiciste para salvar lo que estuvo a punto de perderse, estuvimos a punto de rendirnos, me había rendido y llegué a pensar en dejarte atrás pero tú no lo hiciste… ahora gracias a tí soy feliz, dijiste que esto es una lucha constante, sólo ahora entiendo que el sacrificio nos dará la mejor recompensa, que la distancia no es nada si lo que sentimos es de verdad, me cuesta mucho no estar a tu lado y me sentí abandonada, vacía y estúpida pero si tengo que sentir todo eso para estar juntos nuevamente entonces todo vale la pena.

Debo agradecerte tantas cosas, tu ternura, tu experiencia, tu pasión, la nobleza que tienes en el alma no la había conocido antes, hasta tus equivocaciones porque aprendes de ellas. Somos tan distintos, tú el sol y yo la luna, creo que esa diferencia hace especial lo que tenemos, gracias otra vez por ser tan diferente a mí. Me estás demostrando que mereces toda mi confianza, que tu amor no son sólo palabras y sé que eres especial, tuve mucha “suerte” al conocerte, mereces lo mejor y aunque no comprenda por qué estás conmigo, daré lo mejor de mí porque menos que eso no mereces.

Y aquí estoy esperándote, pidiendo que vuelvas a mí. Aún no tengo la fuerza para soportar una ausencia prolongada, necesito sentir tu piel, respirar de tu aliento, recorrerte a besos, ver a través de tus ojos y sentir tus latidos, no me dejes esperando mucho, todavía soy débil y a pesar que no te gusta que lo diga, nada es seguro.

Te quiero.
Liss

1 comentario:

Kelpie dijo...

Hay mi Liss me has hecho emocionar, abuuuu se muy feliz muy muy feliz!!!