Me duelen los brazos y sobre todo la espalda, ayer terminé la mudanza y como debe ser también se inauguró oficialmente mi nueva morada, invité a mis queridas amigas para celebrar la ocasión y como siempre la reunión fue de lo mejor, aunque sobró trago, esta noche usaremos todo para salir al carrete de más tarde.
Y qué puedo decir de mi nuevo hogar... que está muy bonito, tengo los servicios que no tenía en la pensión anterior y sobretodo internet yeee. El cuarto es espacioso muy bien hecho y con el esencial baño privado, estoy a dos cuadras de la U ¿que más puedo pedir? aunque la gracia es más cara vale la pena... así que por eso estoy contenta.
La única tristeza que puedo tener es que mi Foley no aparece y la verdad que estoy preocupada, es como si se hubiera perdido ayer, no hay forma de olvidarlo a pesar que tenemos una nueva cahorrita que es bien parecida a él... ni modo sólo la paciencia y el tiempo nos dará la razón de que tarde o temprano va a aparecer porque no creo que olvide su casa y la gente que lo quiere.
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